SOJA TEXTURIZADA FINA

Ingredientes: Soja texturizada fina, deshidratada.

Características: La soja texturizada tiene un aspecto rugoso, seco y crujiente y un color entre marrón claro y dorado. Una vez se extrae el aceite y se elimina la piel de la soja, esta se somete a una serie de procesos (alta temperatura, presión, texturización, deshidratación) hasta conseguir un producto especialmente rico en proteína.

Tip: La soja texturizada imita fácilmente a la carne, debido a su consistencia. Sin apenas sabor ni olor, admite muy bien cualquier condimento y receta.

Dejando la soja texturizada en remojo durante unos minutos, su aspecto será similar al de la carne picada, para recetas de pasta, albóndigas, croquetas, tacos, empanadas, pizzas, hamburguesas vegetales...

Alérgenos: Contiene soja. Posibles trazas de otros alimentos, por contaminación cruzada.

Conservación: Proteger de la luz solar y en un lugar fresco y seco. Mantener alejado de fuertes olores. Guardar en un recipiente hermético. Preferentemente, consumir antes de 18 meses, desde su fecha de envasado.

+info: Hay dos maneras posibles para hidratar la soja texturizada: dejándola en remojo o en cocción en la misma receta.

En remojo, en general, necesitará el doble (en volumen) de agua caliente, la absorberá y crecerá bastante. Esta soja ya hidratada es mejor saltearla o dorarla con especias, ya que tiene poco sabor. La soja texturizada, sea fina, gruesa o en filetes, no es pegajosa. Son necesarios otros ingredientes que provean de esa función, para amalgamarla y que no se desintegre. Algunos de ellos son la avena en copos, hortalizas cocidas como la zanahoria, la calabaza o la patata.

Si se opta por cocinarla a la sartén con un poco de aceite de oliva, condimentos o salsa de tomate, absorbe esos sabores y adquiere mucha mejor textura. (fuente: proveedor / cuerpomente.com)

Información nutricional:

Proteínas: 53%

Hidratos de carbono: 35%

Minerales: 5%

Grasas: 1%